El huevo por su naturaleza de producir vida contiene todos los nutrientes para desarrollar y proteger las células y entre ellos cuenta con vitamina E y selenio que son nutrientes antioxidantes que atrapan los radicales libres y mejoran el sistema inmune. 

Una gallina recién madura desarrollando sus fisiologías hormonales puede poner de repente un huevo sin yema, o un huevo con doble yema, o un huevo adentro de otro huevo. Es natural, y hay reportes de huevos con 3 a 5 yemas con un record de 9 yemas en un huevo. 

Los huevos deben estar en lugares frescos, bien identificados su tamaño, fecha de vencimiento y libre de rajaduras, manchas fecales, tierra.

Esta pregunta tiene que ver mucho dónde, cuándo y en qué forma de empaque se compraron los huevos. Los huevos bien almacenados pueden durar meses sin dañarse, a pesar que normalmente recomendamos entre 3 a 4 semanas después que fueron empacados.

Absolutamente cierto. Los investigadores indican que por comer huevo se aumenta el consumo de proteína y esto estabiliza la azúcar sanguínea entre las comidas y disminuye el deseo de picar alimentos que normalmente son como llamamos alimentos de cero valor nutritivo y pura grasa y calorías como dulces, empanadas, papitas, hojaldres y frituras cargadas con aceite animal saturado que hacen crecer la panza. 

El huevo contiene lecitina, que estimula el desarrollo cerebral y ayuda a mejorar la memoria.

Un huevo refrigerado se puede mantener hasta cuatro semanas después de su fecha de empaque.

El huevo contiene selenio y zinc, antioxidantes naturales que contribuyen a mantenerte joven.

El huevo ayuda a la fertilidad por tener un componente básico que produce estrógeno natural, y mejora la capacidad ovular.

Está comprobado que uno de los componentes de la yema reduce de manera significativa la absorción intestinal del colesterol (grasas malas).

Sí, contiene Colina la cual es necesaria para la construcción del sistema nervioso en las primeras etapas de vida de tu bebé.