En un vaso batidor, tritura la harina, los huevos, la leche y 5 gramos de azúcar.
Deja reposar en la nevera 30-40 minutos.
Lava, seca y trocea las fresas.
Añádelas en una olla al fuego y agrega 40 gramos de azúcar, el azúcar de vainilla y el zumo de limón.
Cocina a fuego medio entre 10 y 15 minutos.
Engrasa una sartén antiadherente y echa un cucharón de la masa, de modo que se cubra toda la superficie.
Haz las crepes por los dos lados hasta que agotes la pasta.
Rellena cada crepe con un poco de confitura de fresa.
Enrolla y sirve con azúcar glas por encima.