Tomates verdes - 10 piezas
Chiles serranos - 5 piezas
Ajo - 1 diente
Tortillas de maíz - 12 piezas
Aceite vegetal - 1 taza
Huevos 4 piezas
Cebolla - 1/4 de pieza
Cilantro
Sal - al gusto
Consomé de pollo - 1 cubo
Queso fresco - 150 gramos
Crema agria - 1/3 de taza
Comenzamos preparando los ingredientes de la salsa, para ello necesitamos poner a cocer los tomates verdes, con los chiles, añadimos suficiente agua y dejamos cocer a fuego alto.
Después preparamos los totopos para los chilaquiles, cortamos las tortillas a la mitad y volvemos a cortar a la mitad, de tal manera que queden en triángulos.
En un sartén vertemos 2/3 de la taza de aceite, lo dejamos calentar y freímos los totopos de tortillas de maíz y añadimos sal al gusto. Debemos dorar completamente. Cuando estén listos los retiramos del fuego y dejamos sobre papel absorbente para retirar el exceso de grasa.
Ahora preparamos la salsa, colocamos los tomates verdes, los chiles, 1/3 del agua donde se cocieron, el cilantro, la cebolla y el ajo en la licuadora, añadimos sal al gusto y mezclamos muy bien hasta que todos los ingredientes queden integrados.
Cuando esté licuada la salsa, la colocamos en una cacerola a fuego medio y rectificamos sazón. Dejamos que se caliente.
Una vez que la salsa esté caliente, añadimos los totopos fritos y mezclamos muy bien hasta que las tortillas comiencen a ablandarse, retiramos del fuego.
En el sartén donde freímos las tortillas, añadimos el resto del aceite y hacemos huevos estrellados, añadimos sal al gusto y cocemos de acuerdo a nuestras preferencias.
Servimos colocando en un plato extendido los chilaquiles, añadimos un huevo estrellado por plato y decoramos con crema y queso.