Pelar el ajo y picar. Pelar la cebolla y cortarla en tiras
En una cazuela grande añadimos 3 cucharadas de aceite y añadimos la cebolla y el ajo. Dejamos unos 5 minutos a fuego suave, removiendo de vez en cuando, hasta que la cebolla esté transparente.
Añadimos la harina y dejamos cocinar unos 2 minutos., también removiendo.
Incorporamos las espinacas y vamos mezclando continuamente hasta que las espinacas vayan disminuyendo de tamaño.
Cuando hayan perdido su volumen totalmente, añadimos la leche evaporada. Salpimentar e ir removiendo unos 5-7 minutos, hasta que las espinacas estén tiernas.
Repartir las espinacas en 4 cazuelitas aptas para el horno.
Hacer un hueco en cada una de ellas y echar el huevo. Añadir una pizca de sal en la yema.
Repartir el queso rallado y poner en el horno precalentado a 200º unos 12-15’ hasta que la clara esté cuajada. Servir caliente.